AVANCES Y NUEVOS DESAFÍOS EN EL ESTUDIO DE FRANJAS ENTRE RÍOS – PICHIRROPULLI
¿Por qué se realiza el Estudio de Franja (EdF)?
Por un mandato legal del Estado del año 2016 (Ley de Transmisión N°20.936), que busca responder a la demanda ciudadana e indígena por participar de manera temprana en iniciativas y proyectos que podrían impactar en su forma de vida.
¿Dónde se hace?
El actual Estudio de Franjas “Entre Ríos-Pichirropulli” se está realizando entre las regiones de Ñuble, Biobío, La Araucanía y Los Ríos.
¿Cómo se hace?
A través de un proceso participativo multi-actores (ciudadanos, pueblos originarios, servicios públicos) en el que se identifican en un territorio determinado los elementos ambientales, sociales, culturales, indígenas y técnico-económicos más valorados por sus habitantes, con el fin de lograr una planificación ambiental y socio-culturalmente sustentable territorio en el que a futuro podría instalarse una Línea de Transmisión.
El EdF considera la Evaluación Ambiental Estratégica (EAE), regulada por el Ministerio del Medio Ambiente, y en especial la participación anticipada de todos los actores que habitan e interactúan en el territorio. Cabe destacar que la participación de los pueblos originarios se realiza según los estándares del Convenio 169 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
El EdF se realiza a través del levantamiento de información sobre los “Objetos de Valoración” (OdVs). Éstos corresponden a diversos elementos socio-culturales, ambientales y técnico-económicos presentes en el territorio y la valoración que ellos reciben por parte de las comunidades.
Algunos ejemplos de OdVs relevantes son parques nacionales, reservas naturales, humedales, comunidades indígenas, zonas de interés turístico, sitios de significación cultural o patrimonial, ciudades, pueblos, entre otros.
El Estudio dura aproximadamente 1 año y se desarrolla en 4 etapas en las que se recopila y precisa la información en una lógica de “embudo”, es decir, desde territorios extensos que sucesivamente se van acotando en la medida en que se obtiene más información de cada uno de los OdV.
Etapa 1
En la primera etapa –ya finalizada- se analizó un extenso territorio de 420 km de largo y 90 km de ancho aproximadamente. El análisis de esta área se realizó sobre la base de información recopilada desde fuentes secundarias (datos de servicios públicos especializados) y a través del proceso de participación ciudadana, indígena y de los Órganos de Administración del Estado con sus consideraciones sobre los OdVs ambientales, socio-culturales y productivos.
Como parte de la participación ciudadana se realizaron 13 talleres participativos con actores claves de la sociedad civil, academia, empresas y gremios en las 4 regiones abarca el EdF.
Para la participación de pueblos indígenas se conformó la Comisión de Participación Indígena (CPI), una instancia permanente convocada y organizada por el Ministerio de Energía (MEN), y se realizaron una serie de entrevistas a actores del pueblo Mapuche.
En el caso de los servicios públicos se realizaron 8 talleres con profesionales de las regiones y del nivel central del Ministerio de Medio Ambiente.
La etapa 1 permitió reducir en casi un 90% la extensa área inicial a través de la definición de los 2 Corredores Alternativos de entre 3 y 7 km de ancho cada uno que serán analizados en las siguientes etapas del estudio. La lógica de “embudo” del estudio permitió acotar el amplio territorio analizado en la primera etapa sobre la base de las consideraciones ambientales, sociales y técnicas levantadas en los procesos participativos multi-actores antes indicados.
En el proceso, a partir de fuentes secundarias especialistas identificaron sectores costeros y cordilleranos con una gran concentración de elementos con alto valor ambiental y de biodiversidad, muchos de ellos con protección jurídica (parques nacionales, reservas nacionales, monumentos naturales).
En las áreas centrales de secanos, valles y praderas se identificaron grandes concentraciones de asentamientos humanos como ciudades, aldeas y caseríos, junto a una fuerte presencia de actividades productivas de tipo forestal, agrícola y ganadera.
En sectores intermedios, entre los valles y la cordillera, se distinguieron áreas con menor población, menor presencia de bosques y mayores extensiones agrícolas, además de contar con condiciones geográficas favorables para el desarrollo de proyectos de generación de energías renovables no convencionales.
Finalmente, sobre la base de la Evaluación Ambiental Estratégica y especialmente de los procesos participativos ciudadanos, indígenas y de los servicios públicos, surgieron transversalmente hallazgos y valoraciones que dieron la base para la construcción de las alternativas de Corredores como resultado de la Etapa 1.
Etapas 2 y 3: Corredores alternativos y franjas alternativas
En las etapas 2 y 3 del Estudio, en un diálogo participativo directo con los actores ciudadanos e indígenas de los territorios acotados y concretos de los Corredores Alternativos, se realizará en profundidad un levantamiento de antecedentes para identificar los elementos (usos del suelo, entre otros) que permita definir las Franjas Alternativas (entre 1 a 3 km de ancho) en los mismos Corredores.
El análisis y proceso participativo ciudadano, indígena y de los servicios públicos en la segunda y tercera etapa permitirá que en la Evaluación Ambiental Estratégica el Ministerio de Energía pueda decidir la opción de franja territorial socio-ambiental más sustentable donde a futuro podría licitarse y construirse una Línea de Transmisión.
En el diálogo con las comunidades se usarán cartografías de detalles del corredor en el territorio, en tramos breves, que permitan un reconocimiento de los Objetos o elementos de valoración más relevantes para los habitantes del lugar. Por ejemplo:
Finalmente, destacar que el Estudio de Franjas y su Evaluación Ambiental Estratégica no eximen a la empresa privada que podría adjudicarse la construcción de un futuro proyecto de cumplir con las obligaciones requeridas por el Servicio de Evaluación Ambiental (SEA) para obtener su resolución de calificación ambiental (RCA).